Hoy es el turno de un postre, rico, sencillo y muy resultón.
Después de quedar muy satisfechos con el AJI DE GALLINA con
el que agasajamos a los invitados del cumple de mi esposo, era el turno del
postre.
Una cosa que tenía clara es que no podía ser de chocolate, aunque
yo soy adicta, pero W no tanto y el cumpleañero era él… así que pensando en sus gustos me acordé
de que uno de sus sabores favoritos es sin duda el de LÚCUMA.
Me puse a buscar un postre no demasiado complicado, no
cuento con muchos aparatos que me ayuden en la cocina desde la mudanza transoceánica,
y encontré esta tarta de Sandra Plevisani, una repostera muy conocida en Perú
que cuenta con un buen programa en la televisión nacional.
Debo decir que era la primera vez que manipulaba la lúcuma y
el resultado me ha gustado mucho, así que ahora estoy pensando en otras
posibilidades…
Vamos a por la receta y luego os explico algo más de esta
interesantísima fruta.
Ingredientes
Para la base
v
180 gr de galletas de
vainilla
v
¼ de taza de azúcar blanca
v
100 gr de mantequilla
Para el relleno
v
2 paquetes de queso
Philadelphia
v
1 bote mediano de leche
condensada
v
4 tazas de pulpa de lúcuma
v
½ cucharadita de esencia de
vainilla
v
11 hojas de colapez en
láminas que es la gelatina neutra (yo usé en polvo serían 4 paquetes)
v
¾ taza de azúcar blanca
Para el merengue
v
2/3 de taza de claras a
temperatura ambiente
v
¾ de taza de azúcar blanca
v
2 tazas de pecanas picadas
y molidas
Elaboración
Para la base machacaremos las galletas, mezclaremos con el
azúcar y la mantequilla en pomada. Lo colocaremos bien en el molde presionando
bien la galleta en el fondo. Lo llevaremos por 10 min al horno en 180º. Reservamos.
En un bol mezclar el queso Philadelphia a temperatura ambiente, el azúcar, la
esencia y la leche condensada.
A parte preparar la pulpa de la lúcuma. Pelamos, quitamos
sus semillas y machacaremos la pulpa, nos puede ayudar la batidora y le echamos
un poco de agua. A mí me gustó luego colarlo por si había quedado algún “hilillo”
del interior.
La pulpa la echaremos en la mezcla del queso y mezclaremos
bien.
Es hora de usar el colapez. Yo usé de polvo porque me fue
difícil encontrar de lámina, ésta es más sencilla de usar. Proceder como dice
el envase y echarlo sobre la mezcla anterior. Remover bien que se junte todo
perfecto.
Preparamos el merengue, poner a punto de nieve las claras
con el azúcar.
Montamos la tarta. Encima de las galletas echamos la preparación
de la lúcuma, más o menos la mitad. Ponemos un poco de merengue y las pecanas
por encima. Y con cuidado volvemos a echar la mezcla de la lúcuma. Por último,
pondremos el merengue con sus pecanas. En este punto Plevisani comenta de
ayudarnos con la mano para que levante un poco.
Debo decir que en mi caso las claras que dan en la receta me
resultaron un poco insuficientes, al menos para el decorado final, me hubiera
gustado que resaltara más. Lo comento por si alguien lo quiere hacer y que
ponga algunas claras más en el merengue.
Llevamos la tarta al congelador toda la noche. Al día
siguiente yo la bajé a la nevera porque no me interesaba una tarta helada, sino
más bien cremosa.
Utilizar un molde grande porque cunde bastante, es más a mí
me sobró la parte de la lúcuma y la dejé en reposo para al día siguiente tomarlo como si
fuese gelatina.
No tengo foto del corte porqué se formó un revuelo para
repartir impresionante… tenía un montón de niños a la espera del reparto.
Al menos me dio tiempo a hacer la foto del resultado final.
El resultado os puedo decir que ha sido una tarta ligera,
con sabor y olor a lúcuma, y según algunos “ha sido lo mejor que he hecho nunca”.
Estoy contenta con el postre, es posible que repita utilizando
esta fruta tan peruana.
LÚCUMA
EL lúcumo es un árbol originario de las regiones
subtropicales de Sudamérica como Perú y Bolivia, cuya fruta la lúcuma es muy
apreciada en la gastronomía de la zona y se considera fruta nacional de Perú.
La lúcuma es un futo oblongo, con un ápice cónico
redondeado. Está cubierto por una piel delicada de color verde brillante cuando
está inmaduro y se pone más pardo en la madurez. Su pulpa es de color
amarillo-anaranjado, es un poco seca y almidonada pero muy dulce. En su
interior encontramos de dos a cinco semillas ovales y achatadas de color pardo
oscuro.
El cultivo de esta fruta data de la época preincaica, y están
documentados tanto el consumo de la fruta como el uso de la madera.
En la actualidad podemos encontrar su cultivo en Perú, en
las zonas de Lima, Ayacucho, La Libertad, Cajamarca y Huancavelica.
Se ha intentado varias veces introducirlo en el sur de EEUU
pero sin éxito.
En otros países a parte de Bolivia, lo encontramos en México
y Hawai pero su consumo no es muy masivo, en Chile y en Costa Rica se introdujo
su cultivo a mediados del siglo XX.
Su uso en la gastronomía es sobretodo para dulces, postres y
helados, su sabor es muy intenso y se asemeja al jarabe de arce.
Una forma muy habitual de encontrarlo es en lo que en Perú
se conoce como “marcianos” que son los flashes que comíamos de pequeños en
España de hielo y sabor a frutas, en verano las familias lo preparan mucho para
los niños.
Y esta es la fruta…
A mí lo que más me ha gustado es su semilla, tiene una forma
muy bonita… estoy pensando en qué puedo usarla en manualidades, ¡a ver que se
me ocurre!
¿Qué os parece el postre? ¿Alguna vez habéis probado la lúcuma?
Me encantó no solo la receta sino además el resultado pues me la he comido y les digo que es altamente recomendable aunque aun no he decidido cuando hacerla.
ResponderEliminarAdemás me han gustado mucho los alcances respecto a la lúcuma, esta receta está muy completa.
Un abrazo
gracias "anónimo/a" me pregunto quien será de los muchos invitados que había ese dia... estoy en ascuas
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